En primer lugar, mezclaremos todos los ingredientes para marinar el tempeh. Un yogur de soja sin azúcar, el zumo de una lima, el jengibre rallado, el cilantro en semillas triturado con un mortero y el resto de las especias. Mezclamos todos los ingredientes, cortamos el tempeh en daditos, y lo metemos en la mezcla. Revolvemos para que quede todo cubierto y lo dejamos toda la noche reposando. Si nos hemos olvidado de marinarlo toda la noche intentamos tenerlo el máximo tiempo posible, ya que el sabor será mejor.
Picamos en daditos la cebolla y la pochamos a fuego medio.
Cuando este transparente añadimos el ajo, el jengibre rallado y unos tomates que sean bien aromáticos en daditos. Cocinamos hasta que el tomate se deshaga totalmente.
Mientras sigue cocinándose la salsa, pasaremos a sofreír el tempeh. A fuego medio añadimos en la sartén el tempeh con el marinado. Reducimos hasta que desaparezca el marinado y subimos un poco el fuego para que se dore el tempeh.
En este momento añadimos el tempeh con la salsa restante, la lata de leche de coco y cocinaremos hasta que este espesito. Lo podemos probar y añadir más especias si queremos, aunque para nuestro gusto así esta perfecto. Para emplatar lo servimos con un arroz basmati y un poco de cilantro en hoja. ¡Delicioso!